“Veo la psicoterapia como una terapia de la relación. De la relación entre uno mismo y el otro, entre uno mismo y nuestro entorno. Y esa relación también es lo que se teje en el curso de las sesiones y del tiempo que pasa (…); es lo que se co-escribe entre el paciente y el terapeuta.
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Palabras de Jean-Marie Delacroix.
¿Cómo te llevas con tus emociones? ¿Las rechazás? ¿Las querés controlar? ¿O las abrazás?
Si no se integra las emociones, éstas se enfurecen por dentro y en algún momento se van a hacer escuchar. El camino saludable es poder mirar de frente a las emociones, poder escucharlas, poder abrazarlas. En realidad, se trata de mirarnos, escucharnos y abrazarnos a nosotros mismos.
"Las emociones son fundamentalmente adaptativas. Se trata de señales internas que nos dirigen para poder mantenernos vivos. En comparación con la cognición, la emoción constituye un sistema biológicamente más antiguo, de respuesta rápida y adaptativa, un sistema destinado a mejorar la supervivencia".
(Leslie Greenberg)
Las emociones nos organizan para la acción:
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El miedo tiene una función apremiante orientada a la supervivencia, a provocar que uno escape del peligro.
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El enojo nos lleva a defendernos cuando nos sentimos atacados o a protegernos de intrusiones. Ayuda a establecer límites sanos.
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La ansiedad nos pone en alerta y nos prepara para enfrentar o evitar un peligro potencial.
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La tristeza permite la retirada y retraerse en uno mismo, o bien para acercarnos a otros en búsqueda de auxilio.
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El asco nos aleja de las situaciones, personas o sustancias que pueden hacernos mal.
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Sentirnos felices y amorosos nos prepara para la cooperación. La alegría nos ayuda a fortalecer las relaciones interpersonales.
Las sesiones online son de preferencia para muchos y constituyen una modalidad eficaz, propia de las nuevas formas de comunicación que propone el mundo actual. Desde la comodidad de tu casa podemos estar conectados a través de la virtualidad, posibilitando el trabajo psicoterapéutico desde cualquier parte del mundo.